Un estudio de cadáveres momificados de Egipto, Perú y
América del Norte ha revelado que los humanos prehistóricos también
tenían arterias atascadas -una condición que puede provocar ataques al
corazón.
Los hallazgos del estudio, publicados en la revista médica Lancet, sugieren que las enfermedades cardíacas podrían ser algo inherente al ser humano.
La mayor parte de la gente asocia este tipo de enfermedades con vicios modernos como fumar o la obesidad.
Los investigadores analizaron 137 momias de
cuerpos con hasta 4.000 años de antigüedad y descubrieron que un tercio
tenían arterias atascadas.
Noticia publicada por BBC Mundo.