Mitología indígena: el Payak

Es una especie de genio coordinador de los espíritus del Mal. Para los Tobas y Pilagás no existe la muerte natural, y todos los decesos (a excepción de los que tienen lugar en luchas guerreras) son obra de los payaks.

Este espíritu se deleita absorviendo la sangre de los enfermos, por sí mismo o convocado por un hechicero. En este último caso el espíritu se ausenta del cuerpo del enfermo y se refugia en un árbol (especialmente el yuchán -también Chorisia o Palo Borracho-) hasta que el hechizo abandona el cuerpo.

Cuando muere algún indio hechizado -casi todos- se le quema la ropa y se le entierra al estilo de los matacos, siendo por lo tanto muy común la sepultura aérea. Para estos indígenas cada muerto reencarna en otro ser: tigre, perro, cabra, planta, etc. según haya sido su comportamiento en vida.


Por otra parte, la sepultura aérea consiste en colocar al muerto en las ramas de los árboles y sólo luego se procederá al enterramiento

Fuentes: El cuco, Abarcus Rosario (en cazadores y recolectores, paleoamerindios)